Ahorrar energía nos conviene a todo, con ello evitamos la emisión de Gases de Efecto Invernadero (GEI). Ayudamos a revertir el calentamiento global. Es un tema en el que todos debemos participar.
ILUMINACIÓN
Sustituye los focos incandescentes por lámparas; estas consumen alrededor de 75% menos energía, habrá una mejor refracción.
Pinta los interiores de tu casa de blanco o colores claros, habrá mayor refracción de la luz y necesitarás menos watts para iluminarla.
Apaga la luz si no estás en una habitación.
En la medida de lo posible, aprovecha la luz natural.
REFRIGERACIÓN
Procura que tu refrigerador tenga el sello FIDE, garantía de eficiencia energética.
Comprueba que la puerta cierre perfectamente y ábrelo lo menos posible.
Revisa que los empaques estén en buenas condiciones y colócalo en un lugar ventilado o fresco.
No introduzca alimentos calientes al refrigerador.
LAVADO DE ROPA
Llena tu lavadora al máximo permitido.
Utiliza el detergente necesario, porque demasiada espuma fuerza más el motor
PLANCHADO
Plancha la mayor cantidad posible de ropa en cada ocasión, ya que este aparato consume menos energía cuando lo enciendes.
Nunca dejes la plancha conectada innecesariamente.
INSTALACIÓN ELÉCTRICA
Comprueba que tu instalación eléctrica no tenga fugas de energía.
Desconecta todos los aparatos eléctricos, apaga todas la luces y verifica que el disco de tu medidor no gire; si lo hace, haz revisar la instalación.
AIRE ACONDICIONADO Y CALEFACCIÓN
Procura que el equipo de aire acondicionado o calefacción sea adecuado a tus necesidades.
Mantén la habitación cerrada mientras estén funcionando; el aislamiento ayuda a mantener la temperatura.
Dale mantenimiento a tu aire acondicionado limpiando los ductos y cambiando los filtros de forma regular.
Para el invierno es suficiente ponerlo en 18ºC y en verano 25ºC.